GARANTÍA HIPOTECARIA
La garantía hipotecaria puede ser una vivienda o un bien inmueble que se ofrece como aval para el pago de una deuda. Es la manera para que se pueda acceder a un préstamo con facilidad.
Un préstamo con garantía hipotecaria es aquel que cuenta con un inmueble como respaldo.
En caso de impago, el prestamista podrá tomar posesión del bien para venderlo y recuperar el financiamiento otorgado.
El préstamo obtenido con una garantía hipotecaria puede ser utilizado para diversos fines: pagar deudas, estudios, viajes, inversiones, entre otros que el cliente desee.
Es posible acceder a un crédito con garantía hipotecaria aunque el inmueble no haya terminado de pagarse por completo.
También puede permitirse que el inmueble puesto como garantía hipotecaria sea vendido, siempre que el dinero obtenido con la transacción sea utilizado para pagar el préstamo.

VENTAJAS DE LOS PRÉSTAMOS CON GARANTÍA HIPOTECARIA
Entre las ventajas de los préstamos con garantía hipotecaria destacan:
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Permite acceder a préstamos a personas que no poseen ahorros líquidos (en una cuenta bancaria, por ejemplo) para la garantía, pero sí una propiedad que les puede servir como aval.
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Da mayor seguridad de reembolso de un préstamo, por lo que puede negociarse un tipo de interés más bajo que si no se tuviera esa garantía.
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Reiterando parte del punto anterior, el acreedor podrá tener mayor seguridad de que recuperará el dinero prestado.
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Como mencionamos anteriormente, el crédito puede ser usado de distintas formas, es decir, el deudor tiene libre disponibilidad.
DESVENTAJAS DE LOS PRÉSTAMOS CON GARANTÍA HIPOTECARIA
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El deudor puede perder su vivienda si cae en impago.
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Se podría solicitar que el inmueble esté pagado en su totalidad. En ese caso, si a la persona le falta un año para cancelar su crédito hipotecario, no califica.
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El inmueble usualmente debe estar exento de cargas, por ejemplo, de tributos pendientes que deban pagarse al municipio.
